Han pasado dos décadas desde el estreno en el cine de Dos Tontos Muy Tontos, y aún hoy sigue provocando risas y homenajes, como el de esta broma de cámara oculta. Al igual que en la famosa escena de la película, en la que Jeff Daniels se queda con la lengua pegada al hielo del telesilla, este actor pide ayuda a los incautos viandantes que le salen al camino.