Esto de los selfies se está convirtiendo a este paso en un arte extraño, con sus normas de estilo, sus reglas y sus propios significados. Probablemente ya seas todo un experto o experta en hacerte autofotos, pero a lo mejor hay conceptos que se te siguen escapando. Bien, pues en este sketch se explica de forma muy clarita lo que se debería hacer para tomarte un buen selfie, y sobre todo, qué es lo que terminantemente debería estar prohibido y penado con la cárcel por atentar contra las normas más elementales del buen gusto. ¡Acabáramos!
Sea como sea, esto de los selfies parece que es una moda o afición que va para rato. ¿A quién no le gusta salir bien en una instantánea y recibir piropos a puntapala? Con lo difícil que era antes cuando echabas una foto al azar y luego la revelabas… Ahora puedes hacerte infinitas tomas hasta que des con la perspectiva, la luz y el encuadre y que coincida con una alineación de astros que te favorezca, si hace falta… Todo con tal de recibir favs, retuits y likes como si no hubiera un mañana. Porque, no nos engañemos, a nadie le amarga un dulce y todo el mundo tiene un puntito de presumido. Solo hay que saber cavar un poquito para que aflore a la superficie…
Y como ya hace tiempo que no traemos nada de Joaquín Reyes, y eso siempre es un pecadillo (no mortal, pero tampoco inocente), aquí tenéis una de sus últimas apariciones en El Intermedio de Wyoming, donde se ha especializado últimamente en hacer imitaciones caracterizándose como los personajes parodiados, al estilo de lo que hacía en Muchachada Nui con la sección de «Celebrities». Por supuesto, dado el contenido del programa, los personajes están íntimamente relacionados con la actualidad más rabiosa, y en este vídeo la imitación está inspirada por uno de los personajes políticos que más han dado que hablar (y no precisamente para bien) en las últimas semanas, por las razones que ya todos sabréis.
¡Con todos ustedes, la imitación de la actual ministra de Sanidad, Ana Mato! Y con sus cochazos Jaguar de quita y pon incluidos, que no falte de nada en el atrezzo.
